En mi pueblo mi apodo era “el Burdeos”; motivado porque un tío bisabuelo mío fue el que introdujo en Vilanoveta, perteneciente al Garraf cuya capital es Vilanova i la Geltrú, despues de estar una temporada en Burdeos la Cabernet y la Merlot,.Al ser estos monovarietales de unas cosechas a menos de la mitad de las variedades autóctonas que allí tenemos, lo trataron de loco y a las generaciones sucesivas les han seguido tratando de locos. Los que llevamos el apodo “Burdeos” significa signos de locura.
Los 21 primeros años de mi vida siempre he estado relacionado con el viñedo. Pasé  los 8 años siguientes de mi vida estuve ausente de la vid. A partir de los 29 años hasta hoy me dedico a la venta en el mundo del vino.
He catado una media de 2.000 vinos anuales, esto significa que paso de 100.000 catas, a pesar de todo continuo no siendo ningun entendido en el mundo del vino.y me quedo alucinando cuando escucho a los grandes entendidos de este sector.
No hay suficiente dinero en el mundo para que una bodega me pida “me gusta” en una botella suya si no es de mi gusto y estoy orgulloso del vino que he clasificado con “Me Gusta”. Así es Eduardo Mestres (El Burdeos) un loco enamorado de los vinos.